Por Lorenzo Gonzalo*
Es
bueno señalar que el caso de los agentes de la inteligencia cubana
presos en Estados Unidos, ha logrado cierta cobertura de prensa en los
últimos meses, aunque esta no ha llegado a los medios escritos y
televisivos de mayor alcance público en Estados Unidos.
Hemos
señalado que cualquier final feliz para los tres que aún permanecen
injustamente en prisión, acusados de delitos que no cometieron y de
conspiraciones que nunca tuvieron lugar, depende en gran medida del
trabajo que haga la prensa nacional estadounidense.
No
podemos descontar los beneficios que puedan tener las gestiones
realizadas por terceros países en momentos que las circunstancias lo
permiten. Este es el caso por ejemplo, del Presidente de Uruguay José
Mujica quien ha estado negociando con la Casa Blanca para facilitar el
cierre de la prisión de Guantánamo. Mujica recientemente le pidió al
Presidente Obama que libere a los mencionados agentes.
Pero
más allá de toda gestión de esa naturaleza, lo más importante es que el
resultado de esas coberturas de los medios puedan despertar en Obama su
interés de valorar la injusticia del caso y la monstruosidad de haber
condenado a un hombre, Gerardo Hernández Nordelo, con pruebas
inconsistentes y dentro de un escenario que no permitía el complot de
"conspirar para cometer asesinato". De aquí que la importancia mayor es
que, cualquiera que sea la gestión, permita que el Presidente pueda
actuar con pleno convencimiento sobre el caso y sin temor a los ataques
de sus enemigos políticos. Nos referimos al tema, mencionado en otras
oportunidades, de otorgar un perdón presidencial a los tres que
permanecen en prisión, lo cual difícilmente tendría lugar mientras la
sombra del "asesinato de estadounidenses" nuble la verdad del caso,
porque obviamente eso constituye un gran impedimento para hacer uso de
su discreción presidencial.
El
tema de los Cinco ha cobrado fuerzas a partir del activismo de la
esposa del estadounidense Allan Gross, condenado a 15 años en Cuba,
quien últimamente ha mostrado un activismo racional a favor de su
esposo, fundado en las realidades políticas de la problemática USA –
Cuba.
En
sus últimas declaraciones, Judy Gross ha involucrado a los Cinco en su
petición para que Obama intervenga en el caso de su esposo.
Al
decir esto, la señora Gross implícitamente reconoce la existencia de
una problemática común que ha dado lugar tanto al encarcelamiento de uno
y otros aunque ambos casos disten de parecerse.
Lo repetitivo del asunto continúa siendo el silencio que los medios aún persisten en ocultar.
Ninguna
prensa nacional en estos días, salvo la proyección local de Miami de la
cadena Univisión en la noche del pasado viernes 27 de junio, ha
publicado que Judy Gross pide la liberación tanto de su marido como de
los tres agentes aún prisioneros en Estados Unidos.
De todas maneras hay adelantos y espacios como CNN y otros, han publicado las últimas declaraciones de la señora Gross.
Es
importante la opinión pública y es importante que periódicos como el
Nuevo Herald se quiten el manto farisaico que los define en asuntos de
esta naturaleza, aborden el tema y publiquen todo lo que está
ocurriendo. Para eso está la prensa. Nosotros no creemos en "secretos de
Estado" o declaraciones "políticamente correctas", que en el fondo no
son más que manipulaciones de grupos dominantes o falacias como la
denominada "exilio cubano" que tanto daño le ha hecho a Cuba.
Díganlo Uds. también y repitan conmigo así lo veo y así lo digo.
*Lorenzo Gonzalo, periodista cubano residente en EE.UU., Subdirector de Radio Miami.
Publicado por Virgilio PONCE el julio 12, 2014 a las 3:45pm
Enviado por el autor a: Martianos-Hermes-Cubainformación