Los
5 héroes cubanos visitaron el pozo Aguarico 2 para constatar el daño
producido por Chevron-Texaco en la Amazonía ecuatoriana. / Micaela
Ayala-Andes
Quito, 3 oct (Andes)
- El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, agradeció hoy la
solidaridad de los héroes cubanos que metieron sus manos en piscinas
contaminadas por el consorcio estadounidense Chevron, y comprobaron el
daño ambiental en la amazónica provincia de Sucumbíos.
Ecuador recibe la visita de seis héroes cubanos, cinco de ellos
presos en Estados Unidos por defender a su país de mafias terroristas; y
el sexto encarcelado en Somalia durante 11 años, explicó el mandatario
durante su habitual rendición de cuentas a la ciudadanía en la capital.
Sean bienvenidos Gerardo Hernández, René González, Ramón Labañino,
Antonio Guerrero y Fernando González, que purgaron largas penas de
cárcel en Estados Unidos por luchar contra el terrorismo; y el coronel
Orlando Cardoso, cautivo en Somalia durante casi 11 años, indicó.
Vinieron a Ecuador para asistir al II Encuentro Latinoamericano
Progresista y viajar a Sucumbíos a meter la mano en piscinas
contaminadas por Chevron, que en los años 60 y 90 derramó 16,8 millones
de galones de petróleo en la Amazonia; 18,5 millones de galones de aguas
tóxicas en ríos, y quemó 235 mil millones de pies cúbicos de gas.
La compañía norteamericana se niega, sin embargo, a acatar la
sentencia de un tribunal ecuatoriano que en 2011 la condenó a pagar
nueve mil 500 millones de dólares en indemnización a más de 30 mil
pobladores afectados por las malas prácticas extractivas de Texaco.
Correa aseveró ante centenares de personas que los cinco fueron
incriminados injustamente de espionaje por defender a Cuba de los
terroristas que hoy se pasean impunes por las calles de Miami, y alertar
a la isla y al propio Estados Unidos de atentados.
Sus juicios fueron una pantomima, insistió el jefe de Estado, uno de
ellos fue sentenciado a dos cadenas perpetuas más años de prisión, la
cantinflada de una nación que nos pretende dar cátedra de derechos
humanos.
El gobernante ecuatoriano también resaltó la actitud de madres y
esposas de los antiterroristas, a las cuales calificó de heroínas.
También nuestro respeto a los médicos cubanos aquí presentes en este
enlace, a ellos la merecida gratitud por su sentido altruista y actitud
comprometida socialmente con los necesitados, afirmó.
Fustigó cómo hay sectores que se oponen a esa labor de los médicos
cubanos; en tanto exhortó al pueblo a defender a los galenos
internacionalistas por el bien que hacen en favor del pueblo
ecuatoriano.
Los especialistas cubanos de la salud están donde los nuestros no
quieren estar, el infinito agradecimiento a todos, subrayó Correa.
Los
seis Héroes cubanos podrán comprobar in situ el daño ecológico
ocasionado por Chevron en la Amazonía ecuatoriana. Foto: Andes/Archivo
Quito, 2 oct (Andes).-
Los seis héroes cubanos que visitan Ecuador por invitación del
presidente Rafael Correa constatarán in situ este viernes la
contaminación provocada por la petrolera estadounidense Chevron en la
región amazónica del país suramericano.
Acompañados de la prensa nacional, viajaron a la provincia de
Sucumbíos para recorrer el pozo Aguarico 4, Gerardo Hernández, René
González, Ramón Labañino, Antonio Guerrero y Fernando González, los
cinco cubanos que cumplieron largas penas de cárcel en Estados Unidos
por luchar contra el terrorismo, y el coronel Orlando Cardoso, quien
estuvo preso en Somalia durante casi 11 años.
En la zona que visitarán operó entre los años 60 y 90 del siglo
pasado la empresa estadounidense Texaco, filial de la transnacional.
Según el gobierno ecuatoriano, durante ese tiempo, la petrolera
derramó 16,8 millones de galones de petróleo en el ecosistema amazónico,
vertió otros 18,5 millones galones de aguas tóxicas en suelos y ríos, y
quemó al aire 235.000 millones de pies cúbicos de gas acompañante.
La compañía norteamericana se niega, sin embargo, a acatar la
sentencia de un tribunal ecuatoriano que en 2011 la condenó a pagar
9.500 500 millones de dólares en indemnización a los más de 3000
pobladores afectados por las malas prácticas extractivas de Texaco.
Para denunciar al mundo la contaminación, el presidente Rafael Correa
lanzó en 2013 la campaña internacional "La Mano Sucia de Chevron", que
invita a personalidades, políticos y artistas internacionales a recorrer
las piscinas llenas de brea y crudo que dejó Texaco en medio de la
selva amazónica.
De esta forma, los Cinco, como se les conoce internacionalmente, y
Cardoso se sumarán a las estrellas de Hollywood Danny Glover y Mia
Farrow, el cantante español Luis Eduardo Aute, y la líder indígena y
Premio Nobel de la Paz (1992) Rigoberta Menchú, que visitaron el pozo de
Aguarico 4, y metieron sus manos en las lagunas que 30 años después,
todavía rezuman residuos tóxicos.
El recorrido de los Héroes cubanos coincide con la presentación este
viernes por el presidente Correa y el procurador General del Estado,
Diego García, del libro Caso Chevron, Defensa del Ecuador frente al uso
indebido del arbitraje de inversión, en la Capilla del Hombre.
La obra responde al esfuerzo de la Procuraduría General del Estado
por divulgar los casos emblemáticos para el amparo legal, a través de
publicaciones impresas como el volumen Caso Oxy: Defensa Jurídica de una
decisión soberana y en derecho del Estado ecuatoriano, publicado en
2014.
La Procuraduría General del Estado puntualizó que en 2015 se asumió
el reto de publicar un texto sobre el caso Chevron, con el fin de
exponer la perspectiva y el trabajo de la defensa frente al arbitraje de
inversión de la transnacional Chevron contra Ecuador.
Héroes cubanos participan en el Encuentro Latinoamericano Progresista
(ELAP 2015) en Quito, Ecuador. Gerardo Hernández y Antonio Guerrero
ofrecen declaraciones a TeleSur sobre el restablecimiento de relaciones
entre Cuba y Estados Unidos.
Los cinco antiterroristas cubanos que guardaron
prisión en cárceles de Estados Unidos visitarán Bolivia desde la próxima
semana, invitados por el presidente Evo Morales y su gobierno, informó
hoy el embajador de la isla en La Paz, Benigno Pérez.
Según el diplomático, los Cinco, como se conoce a los Héroes de la
República de Cuba Gerardo Hernández, Ramón Labañino, Antonio Guerrero,
René González y Fernando González, estarán acompañados por otro que
ostenta la referida orden, el coronel Orlando Cardoso.
El grupo
llegará a La Paz en la madrugada del 5 de octubre, procedente de
Ecuador, y desarrollará varias actividades en esta capital antes de
viajar a la oriental ciudad de Santa Cruz de La Sierra.
Desde
territorio cruceño, según el diplomático, los cubanos se trasladarán
hacia la localidad de Vallegrande, el 8 de octubre, donde rendirán
homenaje al guerrillero argentino-cubano Ernesto Che Guevara, a 48 años
de su asesinato en La Higuera, un sitio que visitarán al día siguiente.
Los Cinco fueron apresados en septiembre de 1998 en Miami, donde
penetraban grupos terroristas que operaban contra Cuba, y después de un
juicio amañado fueron condenados a largas condenas en prisiones
estadounidenses.
René González y Fernando González retornaron a
Cuba luego de cumplir sus condenas, en tanto Hernández, Labañino y
Guerrero fueron liberados en diciembre pasado, luego de un acuerdo entre
los gobiernos de Cuba y Estados Unidos.
Cardoso, por su parte,
cumplía misión internacionalista en Etiopía, durante la invasión somalí,
cuando fue herido en combate y hecho prisionero, para ser trasladado
después a territorio enemigo, donde permaneció cautivo durante 10 años y
siete meses.
Las infrahumanas condiciones del lugar donde lo
mantuvieron encerrado y la soledad de su reclusión le provocaron
irreversibles daños físicos.
El grupo de héroes cubanos
abandonará Bolivia el 10 de octubre, luego de cumplir con su objetivo de
agradecer a Morales, a su gobierno y a su pueblo por la campaña
solidaria para su liberación, según el embajador cubano.
De visita en ese país sudamericano, los héroes cubanos rindieron tributo al mártir ecuatoriano Eloy Alfaro
QUITO.—Los cinco antiterroristas cubanos que
cumplieron largas penas de cárcel en Estados Unidos, y el coronel
Orlando Cardoso, quien estuvo preso durante casi 11 años en una cárcel
somalí, rindieron ayer tributo al mártir ecuatoriano Eloy Alfaro.
“Honrar, honra”, aseguró a PL Antonio Guerrero, quien junto a René
González, Ramón Labañino, Fernando González y Gerardo Hernández,
forman el grupo conocido internacionalmente como los Cinco, y que al
igual que Cardoso, son todos héroes de la República de Cuba.
De acuerdo con Guerrero, la ofrenda floral que depositaron este
lunes al pie del monumento erigido a la memoria del líder de la
Revolución Liberal ecuatoriana, constituye un alto honor, y prueba de
ello, dijo, es que fue la primera actividad oficial que cumplieron en el
país sudamericano. Si algo es vital en estos días para las metas que
tenemos por delante es no dejar morir la historia, ni el ejemplo de
estos grandes hombres que nos alumbraron el camino, afirmó.
El coronel Cardoso, por su parte, recordó los lazos de amistad y
solidaridad que unen a Ecuador y Cuba desde la época de las luchas
libertarias que encabezó el Mariscal Antonio José de Sucre, y resaltó
que por las venas de uno de sus tenientes, el joven Abdón Calderón,
quien murió en la batalla de Pichincha, corría sangre cubana.
Al hablar en nombre de los héroes cubanos en la solemne ceremonia
realizada este lunes en un parque de Quito, y en presencia de
integrantes de la brigada médica de la isla caribeña que presta
servicios en Ecuador, activistas locales de la solidaridad con Cuba, y
representantes del cuerpo diplomático, Cardoso rememoró también la
amistad que unió a Alfaro y al apóstol cubano, José Martí.
Guardados en la memoria nacional están los gestos solidarios del
general Alfaro, quien hasta su salario de Presidente donó una vez para
la causa cubana pues estaba convencido, como Martí, que la libertad de
Cuba consolidaría la construcción de las repúblicas latinoamericanas,
afirmó.
Los héroes cubanos llegaron a Ecuador el jueves pasado, por
invitación del presidente Rafael Correa, y cumplen una apretada agenda
que incluye su participación en el II Encuentro Latinoamericano
Progresista inaugurado este lunes en Quito, con la presencia de más de
70 organizaciones de izquierda de 35 países.
También tienen previsto reunirse con miembros de la coordinadora
ecuatoriana de solidaridad con Cuba, y visitar la Amazonía para
constatar el daño ambiental que provocó en esa región del oriente del
país la transnacional petrolera estadounidense Chevron.
Con información de Prensa Latina, tomado de Granma
Si hay una historia dentro de la historia que
sintetiza el antagonismo entre Estados Unidos y Cuba, ésa es la de los
agentes cubanos condenados en Norteamérica a penas desproporcionadas en
relación con los actos cometidos.
Una orquesta de ancianos desafinados ejecuta en desorden un
imposible “Bésame Mucho” en las escaleras de la estación Bruselas Norte.
Algunas estaciones más adelante espera Gerardo Hernández, uno de los
tres agentes de inteligencia cubanos liberados en diciembre pasado luego
del acuerdo al que llegaron Washington y La Habana con la mediación del
Vaticano para el restablecimiento de sus relaciones diplomáticas.
Si
hay una historia dentro de la historia que sintetiza el antagonismo
entre Estados Unidos y Cuba, ésa es la de los agentes cubanos condenados
en Norteamérica a penas desproporcionadas en relación con los actos
cometidos.
Gerardo Hernández es uno de los 5 agentes de inteligencia
cubanos (Ramón Labañino Salazar, René González Sehwerert, Fernando
González Llort, Gerardo Hernández Nordelo y Antonio Guerrero Rodríguez)
que a mediados de los años 90 cumplieron misiones especiales en
territorio estadounidense con el fin de descubrir y desarticular las
acciones terroristas que los grupos contrarrevolucionarios planificaban
en Miami y luego cometían en Cuba –sabotajes, atentados contra los
hoteles y centros turísticos–. Los cinco fueron descubiertos y
arrestados en 1998. Más tarde, en uno de los juicios más extensos de la
historia judicial norteamericana, los agentes cubanos fueron condenados a
penas que, más que a justicia, equivalían a un castigo político
orquestado por la obsesión de las administraciones norteamericanas con
Cuba. A Gerardo Hernández, acusado de “conspiración para cometer
asesinatos”, le tocó lo equivalente a dos cadenas perpetuas.
Por lo
general, estos casos de agentes descubiertos en otro territorio se
resuelven a puertas cerradas y mediante una negociación. Con los cinco
cubanos fue todo lo contrario. Acusados de espionaje y otras
barbaridades, los llamados “Cuban Five” fueron sancionados con un juicio
celebrado en Miami y utilizados como instrumento de manipulación
política. Hoy liberado, nada refleja en la frescura inteligente de
Gerardo Hernández los 16 años pasados en las cárceles norteamericanas,
ni los vejámenes sufridos, ni los largos meses de detención bajo el
estricto régimen de aislamiento absoluto.
Gracias a la intervención del
senador estadounidense Patrick Lehay –uno de los más fervientes
militantes por el fin del embargo contra Cuba– Hernández tuvo un hijo
mientras estaba en la cárcel. El senador ayudó a organizar la
inseminación artificial de la esposa de Hernández, Adriana Pérez. Tras
18 meses de negociaciones secretas y con el papa Francisco como garantía
de lo que había sido imposible, los tres cubanos que permanecían
encarcelados en Estados Unidos (Antonio Guerrero Rodríguez, Gerardo
Hernández Nordelo y Ramón Labañino Salazar) recuperaron la libertad el
mismo día del histórico anuncio, el 17 de diciembre de 2014.
–Los agentes cubanos condenados en Miami fueron el tema que bloqueó
y, al mismo tiempo, desencadenó la negociación con Estados Unidos.
–Sí, exactamente. Nuestro caso duró tanto en el tiempo justamente
por el conflicto y el tipo de relaciones, o de no relaciones existentes,
entre Cuba y los Estados Unidos por más de medio siglo. Eso fue lo que
le imprimió una connotación política al caso de los cinco cubanos, a eso
se debió el ensañamiento con nosotros. Recuerden que años atrás hubo el
caso de unos espías rusos que fueron arrestados. Pero acá, rápidamente
hubo una negociación y fueron enviados a su país sin juicio ni nada. Lo
que complicó el caso nuestro fue la historia del conflicto entre Cuba y
los Estados Unidos. Paradójicamente, también facilitó su solución. Desde
luego, la solución de nuestro caso no se puede resumir a esa
negociación, sino también influyó el apoyo y la solidaridad que
recibimos durante tantos años. Llegó un momento en que los cinco éramos
ya muy conocidos, había presidentes pidiendo nuestra liberación,
personalidades religiosas, políticas y culturales. Nos habíamos
convertido en un caso bastante incómodo para los Estados Unidos. De
todas formas, a nosotros nos costó mucho trabajo hacer que se lograra
hacer conciencia sobre nuestro caso. Fue uno de los juicios más largos
de la historia judicial de los Estados Unidos. Duró siete meses y hubo
más de 100 testigos. La prensa mantenía un silencio casi absoluto. Poco a
poco fue necesario el trabajo solidario de compañeros y compañeras que
salían a manifestar a la calle.
–Hoy lo sabemos, el Papa desempeñó un papel primordial en este
acuerdo. El Vaticano fue garante del proceso de liberación. ¿Usted sabía
que el Vaticano estaba mediando?
–No, no sabía. Para mí fue una sorpresa porque nosotros estábamos
ajenos a todo el proceso de negociación. No conocía el papel desempeñado
por el Vaticano. Me enteré después de lo que ocurrió, del papel que
jugaron varios cardenales, entre ellos el arzobispo de La Habana, el
cardenal Jaime Ortega, a quien le tengo mucho respeto. Estamos muy
agradecidos. Nosotros siempre aceptamos la ayuda de cualquier persona de
buena voluntad. Hay que recordar que nuestro caso, además de sus
connotaciones políticas, fue una gran tragedia desde el punto de vista
humano. Me alegra que el papa Francisco, siendo un papa latinoamericano,
haya sido consecuente. Le puedo decir que siento una gran admiración
por él. Ha tenido una actitud muy valiente, digna de admirar. En nombre
de nuestros familiares y de los cinco, que nos beneficiamos con esa
actitud, le enviamos nuestro agradecimiento.
–De hecho, si se observan las condiciones de la negociación, Cuba no
cedió. Washington juró siempre que jamás negociaría con Cuba en las
condiciones políticas actuales, y, sin embargo, así ocurrió.
–Mi opinión personal es ésta: por mucho tiempo, Estados Unidos se
mantuvo diciendo que no negociaría nada con Cuba mientras existieran los
Castro en el poder –es así como ellos se refieren a que la Revolución y
el pueblo cubano estén en el poder–, también decían que no tenían nada
que negociar con Cuba mientras el Partido Comunista estuviera en el
poder y mientras que la Revolución socialista se mantuviera. Todas esas
condiciones aún existen y sin embargo hemos conversado con la única
condición que Cuba ponía siempre: una conversación de igual a igual, con
absoluto respeto a nuestra soberanía y nuestra independencia.
–¿En algún momento sintió el peso de la historia que estaba sobre sus espaldas? Ustedes eran, en gran parte, la clave del nudo.
–Nunca vi el caso en esa magnitud. Recién empecé a sentir eso en los
tiempos finales, cuando se rumoreaba que podría haber una solución, y
sobre todo, cuando me enunciaron que iba a ser liberado. Ahí sí supuse
que ese podría ser el camino para que se avanzara algo más. En ese
momento no sabía que se había avanzado mucho más. Me enteré cuando el
presidente Raúl Castro pronunció sus palabras y estaba a su lado junto a
nuestros familiares. Los tres cubanos liberados no sabíamos nada de la
negociación. Nos informaron un día antes de la liberación y nos
enteramos del restablecimiento de las relaciones diplomáticas con las
palabras de Raúl.
–Su caso representa un ejemplo mundial de la utilización de la justicia como instrumento de un conflicto con otro Estado.
–Si, el caso de los cinco fue más una venganza contra le Revolución
cubana, contra los cubanos revolucionarios. Estados Unidos vio la manera
de anotarse un punto y lo hicieron tomando a cinco personas como
rehenes. Nosotros reconocimos que habíamos violado algunas leyes de
Estados Unidos, como tener un pasaporte falso o ser un agente de otro
país sin inscribirnos en el Departamento de Estado. Ahora bien,
legalmente, nosotros teníamos derecho a hacer una defensa de necesidad y
explicar por qué, pero no se nos permitió. El juicio tuvo lugar en
Miami y carecimos de toda garantía. Fue un juicio totalmente parcial.
Fuimos encontrados culpable y se nos impuso la máxima sentencia posible
en todos los cargos. Castigando a los 5 pensaron que castigaban a la
Revolución cubana. El plan inicial era que, todos o algunos,
traicionaríamos y podernos usar así en un show mediático contra la
Revolución. No lo consiguieron y por eso vinieron los 17 meses en celdas
de castigo, más otros meses que pasamos en las mismas celdas sin haber
cometido ninguna indisciplina. Por eso nos negaron las visitas de
nuestras esposas.
–Paradójicamente, mientras a ustedes los condenaban, en Miami circulaba gente con un prontuario muy espeso.
–¡Es increíble! Estados Unidos dice tener una guerra contra el
terrorismo. Hay jóvenes norteamericanos que sirven en el ejército y han
muerto en otros países en nombre de esa lucha contra el terrorismo.
¡Pero tienen a los terroristas ahí! Todavía hoy Luis Posadas Carriles se
pasea libre por las calles de Miami. Posadas Carriles es el autor de un
atentado contra un avión de Cubana de Aviación que, en 1976, les costó
la vida a 73 personas, es promotor de bombas en hoteles de La Habana que
se cobraron la vida de un italiano. Tiene un historial terrorista
inmenso y se pasea libremente por las calles. Carriles y otros fueron
entrenados por la CIA con el objetivo de derrocar a la Revolución
cubana. Hubo un momento en la historia en que la CIA no tuvo nada más
que ver con ellos, pero miraron hacia otro lado y han hecho lo que han
querido.
–¿Esa fue su misión cuando fue enviado a Miami, investigar a esos grupos?
–Sí, Ibamos a investigar los planes de grupos terroristas como Alpha
66, los Comandos F4, Hermanos al rescate. Estos grupos todavía existen,
tienen ahí sus campos de entrenamiento. Lo cierto es que Cuba se quejó
muchas veces por las labores de estos grupos ante el gobierno
norteamericano, pero Estados Unidos continuó dándoles impunidad a esas
personas y, por consiguiente, fue necesario que Cuba enviara a sus
operativos para investigar e infiltrar esos grupos, enviar información a
Cuba y prevenir los actos terroristas.
–¿Su mirada sobre Estados Unidos y la Revolución cambió?
–Cambió en el sentido de que hoy mis convicciones y mi carácter de
revolucionario son más sólidos, al igual que mi amor por el pueblo
cubano. Viví 16 años en esas cárceles y en esa sociedad y en esos años
compartí en las prisiones muchísimas historias, dramas humanos, vidas de
jóvenes que pudieron haber sido ingenieros o doctores y, con apenas 20
años, están condenados a cadena perpetua. Esto es porque hay un sistema
que, desde que nacen, les inculca que hay que tener más y pisotear a
cualquiera con tal de triunfar en la vida y tener cosas. Es un
embrutecimiento total, se trata de un verdadero drama humano. Haber
pasado años en Estados Unidos, tanto en la calle como en la cárcel, ha
reafirmado mi convicción de que no importa cuántos problemas tengamos en
Cuba, tenemos que seguir trabajando para perfeccionar nuestro sistema y
nuestro socialismo. Yo no quiero para Cuba nada parecido a lo que viví
en Estados Unidos. De todas formas, yo no guardo ningún resentimiento ni
ningún rencor hacia Estados Unidos. No siento odio por nadie. Acaso
compasión.
–Usted también enfrenta otro cambio: recupera la libertad en otro
momento de la Revolución y con el gran enemigo como, tal vez, nuevo
aliado. La Cuba durante la cual usted estuvo preso no es la Cuba de su
libertad.
–¡Claro, sería raro que fuese la misma Cuba porque entonces
estaríamos negando la dialéctica nosotros mismos! Me alegro de que Cuba
haya cambiado y de que la mayoría de los cambios sean para bien. Ninguna
revolución puede quedarse estática. Estamos confiados en que el pueblo
cubano podrá enfrentar los retos a los que se enfrenta con este proceso.
Son retos importantes. Hay personas que apuestan por que, a través del
abrazo del oso, podrán lo lograr lo que no consiguieron durante más de
50 años de bloqueo, de agresiones y amenazas.
Decenas de ecuatorianos acogieron con calidez a los cinco luchadores
antiterroristas de Cuba que cumplieron largas penas de cárcel en Estados
Unidos y a Orlando Cardoso Villavicencio, militar apresado durante casi
11 años en Somalia.
En el aeropuerto internacional Mariscal Sucre de Quito, capital de
Ecuador, los seis héroes cubanos fueron recibidos por la secretaria
subrogante de Gestión de la Política, Paola Pabón, y luego se fundieron
en abrazos con la multitud congregada en las afueras de la terminal
aérea.
Allí también se encontraban integrantes de la brigada médica cubana
destacada en Ecuador y otros miembros de la misión estatal de la isla
caribeña.
Traemos un gran abrazo y un mensaje de gratitud para todas las
personas que nos acompañaron desde Ecuador en nuestra lucha por la
justicia durante 16 años, aseguró a la prensa Gerardo Hernández, quien
llegó acompañado de Fernando González, Antonio Guerrero, Ramón Labañino y
René González, conocidos internacionalmente como los Cinco.
El grupo fue arrestado en septiembre de 1998 en Miami, donde se
dedicaban a monitorear a las organizaciones terroristas anticubanas
radicadas en el sur de la Florida.
Condenados a largas penas de cárcel en 2001, René y Fernando salieron
en libertad en 2013 y 2014, respectivamente, tras cumplir íntegramente
sus sentencias.
Gerardo, Ramón y Antonio fueron liberados el 17 de diciembre pasado,
como parte de las negociaciones entre Cuba y Estados Unidos que dieron
paso al proceso de normalización de las relaciones bilaterales.
Cardoso, por su parte, cayó en manos de las tropas somalíes mientras
combatía como internacionalista en tierras etíopes a finales de la
década del 70 del siglo pasado, y permaneció casi 11 años en las
cárceles de ese país africano.
La presencia de estos seis héroes cubanos en Ecuador nos motiva
muchísimo porque son ejemplo de lo que es ser un revolucionario, y
porque son personas que estuvieron dispuestas a arriesgar la vida y
libertad por sus ideales y principios, comentó Pabón a Prensa Latina.
De su lado, la asambleísta María Augusta Calle, presidenta de la
Coordinadora Nacional de Solidaridad con Cuba, y quien desde su curul en
el Parlamento ecuatoriano impulsó varias resoluciones a favor de la
liberación de los Cinco, señaló que tener a los antiterroristas en el
país suramericano demuestra que la persistencia, la lealtad y la
valentía es importante en todo proceso revolucionario.
Todos los ecuatorianos solidarios con Cuba estamos pletóricos de
alegría de tenerlos en nuestra tierra, aseveró por su parte el abogado
Hernán Rivadeneira, presidente del Comité Ecuatoriano por la Justicia y
la Libertad de los Cinco.
Los seis héroes cubanos, que viajaron a Ecuador por invitación del
presidente Rafael Correa, participarán el lunes en la inauguración del
II Encuentro Latinoamericano Progresista, evento que reunirá en Quito a
más de 300 representantes de unos 70 movimientos y partidos políticos de
izquierda.
Su agenda incluye además encuentros con organizaciones sociales y de
solidaridad con Cuba, recorridos por lugares de interés social y
turístico, y una visita a la Amazonía ecuatoriana, para constatar la
contaminación ambiental que provocó la transnacional estadounidense
Chevron en esa región.
Venimos a expresar nuestro compromiso de solidaridad con la
Revolución Ciudadana, y el presidente Correa en momentos en que hay una
ofensiva de la derecha en Ecuador, adelantó Fernando González, quien al
igual que el resto de sus compañeros se mostró muy agradecido por el
recibimiento.
Los Cinco Antiterroristas cubanos visitarán a Ecuador del 25 de septiembre al 4 de octubre, de acuerdo con la agencia de noticias Andes, que confirmó la información con la embajada de Cuba en la nación andina.
Gerardo Hernández, René González, Ramón Labañino, Antonio Guerrero y
Fernando González, quienes son Héroes de la República de Cuba, viajarán a este país atendiendo a una invitación de la Presidencia, reseña la nota.
Ellos habían sido condenados a penas extremas, incluidas dos cadenas perpetuas más 15 años de privación de libertad
en el caso de Hernández, por abortar acciones terroristas contra su
país organizadas desde Estados Unidos por grupos anticubanos asentados
en La Florida. Por su parte, René y Fernando González ya habían retornado a su país tras cumplir sus penas de 13 y 15 años de cárcel.
Según la agenda preliminar, estos cubanos participarán en el Segundo Encuentro Latinoamericano Progresista (ELAP), que se desarrollará los días 28, 29 y 30 de este mes con la participación de más de 80 organizaciones políticas.
Integra también la delegación el coronel Orlando Cardoso Villavicencio, quien es Héroe de la República de Cuba y permaneció más de 11 años preso
en Somalia; además, José Ramón Balaguer y Francisco Delgado, jefe y
miembro, respectivamente, de la Dirección de Relaciones Internacionales
del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, y Kenia Serrano,
presidenta del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP).
Además, sostendrán un encuentro multitudinario en la Capilla del Hombre al que asistirán integrantes del Movimiento de Solidaridad con Cuba en Ecuador, de la Asociación de Cubanos Residentes en este país (Acure), representantes del gobierno e invitados.
Está previsto que rindan homenaje a los próceres de Ecuador, Eloy Alfaro, y de Cuba, José Martí,
en los monumentos a ambos en Quito. También asistirán al cambio de
guardia en el Palacio de Carondelet, sede de la presidencia de Ecuador.
El 20 de diciembre de 2014, apenas tres días después de su liberación, el presidente ecuatoriano, Rafael Correa, invitó a los Héroes cubanos a conocer su país “y a descansar después de tanto sufrimiento”.
“Por fin se pueden reunir con su familia, un abrazo solidario y los
invitamos a que vengan a Ecuador”, dijo Correa en esa oportunidad.
Hace 17 años los Cinco héroes cubanos
fueron detenidos injustamente por el FBI por defender la soberanía de su nación
y evitar ataques terroristas planeados desde EE.UU.
El 12 de septiembre de 1998, Gerardo
Hernández, Ramón Labañino, Antonio Guerrero, Fernando González y René González,
conocidos como los Cinco héroes cubanos, fueron detenidos en Estados Unidos por
la Oficina Federal de Investigaciones (FBI, por su sigla en inglés) por
prevenir las acciones violentas que desde territorio estadounidense impulsaban
grupos terroristas contra Cuba.
Sabotajes, agresiones contra Cuba que
dejaron miles de personas fallecidas y heridas, numerosas pérdidas económicas,
contrabando de armas, drogas, así como planes para asesinar al líder de la
Revolución Cubana, Fidel Castro, formaron parte de las acciones subversivas
emprendidas por grupos anticubanos financiados por Estados Unidos.
Tras el arresto, los Cinco permanecieron
sin fianza durante 33 meses y durante 17 meses fueron confinados en celdas para
prisioneros violentos.
Pese a que durante los juicios no se
presentó ninguna prueba que los inculpara, fueron acusados por el Gobierno
estadounidense de conspiración y condenados a severas condenas.
Sectores anticubanos emprendieron una
campaña con el fin de presionar a la opinión pública de Miami y al jurado en su
contra.
Cargos imputados y sentencias
Gerardo Hernández fue sentenciado a dos
cadenas perpetuas por conspiración para cometer asesinato en primer grado y
conspiración por espionaje, así como 15 años por cargos de conspiración para
cometer delitos contra EE.UU., documentación falsa y agente extranjero. El 17
de diciembre de 2014 fue liberado.
Ramón Labañino fue condenado a cadena
perpetua por conspiración para cometer espionaje, más de 18 años por
conspiración para cometer delitos contra EE.UU., documentación falsa y agente
extranjero. También fue liberado el 17 de diciembre de 2014.
Antonio Guerrero fue sentenciado a
cadena perpetua por conspiración para cometer espionaje, así como 10 años por
conspiración para cometer delitos contra EE.UU. y agente extranjero. Fue
liberado el 17 de diciembre de 2014.
Fernando González fue sentenciado a 19
años de prisión por conspiración por cometer delitos contra EE.UU.,
documentación falsa y agente extranjero. Tras cumplir una condena de 17 años y
nueve meses fue liberado el 27 de febrero de 2014.
René González estuvo privado de libertad
durante 15 años por conspiración para cometer delitos contra EE.UU. y agente
extranjero. En 2013, la solicitud presentada por González para modificar las
condiciones de su libertad supervisada y permanecer en Cuba fue aceptada a
cambio de renunciar a su ciudadanía estadounidense.
El estadounidense Alan Gross, quien
cumplía una condena de 15 años en Cuba por espionaje, fue liberado en diciembre
pasado. Inmediatamente, el Gobierno de EE.UU. autorizó la liberación de
Hernández, Labañino y Guerrero.
EE.UU. continúa financiando programas de
subversión contra Cuba
EE.UU. continúa financiando planes
subversivos contra Cuba por medio del uso de redes y programas informáticos
para alterar el orden en la isla y agredir la legitimidad del Gobierno.
La Fundación Nacional Cubano Americana
(FNCA), el Consejo por la Libertad de Cuba (CLC), Hermanos al Rescate,
Movimiento Democracia, Alpha-66, el proyecto ZunZuneo, entre otras, son algunas
de las organizaciones que han emprendido actos terroristas contra la isla.
Este contenido ha sido publicado
originalmente por teleSUR bajo la siguiente dirección:
Durante
más de una década cada doce de septiembre esta periodista llenaba la
hoja en blanco del día con frases que encerraban el deseo de ver libres a
Antonio, Gerardo, Ramón, Fernando y René, Héroes de la República de
Cuba, soldados de la patria en el silencio. Cada año albergaba la
esperanza de sustituir mi discurso nostálgico y rebelde por otro de
fiesta y celebración por el regreso de nuestros cinco.
Aunque
jamás deseché la esperanza en la justicia, hubo instantes inconfesados
de miedos, dudas y hasta de pesimismos. Finalmente vuelve a ser doce de
septiembre y puedo escribir algo diferente. Pero ahora no me asiste la
retórica de la cárcel y las arbitrariedades que truncaron parte de la
juventud de ellos. Como invitó Gerardo en cuanto puso los pies en suelo
cubano, es hora de de pasar la página y hablar del futuro, sin olvidar,
por supuesto el pasado.
Gema,
la hijita de Gerardo Y Adriana es el regalo que ilumina esta nueva
parte de la historia que comenzó a escribirse el 17 de diciembre de
2014. Su carita, sus ojos, su inocencia feliz constituyen el mejor
incentivo para continuar llenando las hojas en blanco día tras día. Es
ella y todo lo que representa lo que guía las teclas de la computadora
donde esta humilde periodista y amiga de los Cinco se obstina en
construir esperanzas y caminos para los demás.
*Periodista
de Radio Jaruco, donde lleva desde hace algunos años el programa Alas
de libertad, dedicado a los Cinco Héroes cubanos